Pocas marcas de bicicletas en el mundo tienen tanta experiencia como Orbea. La marca vasca empezó a producir bicicletas en el año 1931; casi 100 años de aprendizaje, esfuerzo y superación que explican por qué se trata de una de las marcas más reconocidas y galardonadas del planeta.
Podría pensarse que semejante legado convierte a las bicicletas Orbea en modelos muy tradicionales y poco innovadores, pero nada más lejos de la realidad: las bicicletas Orbea están en la absoluta vanguardia de la tecnología, la integración y la personalización.
En el ámbito del mountain bike numerosas bicicleta Orbea de montaña son modelos de referencia para prensa y aficionados, tanto E-bikes como bicicletas de doble suspensión o rígidas:
Entre las bicicletas de montaña eléctricas destaca la Orbea Rise, una E-Bike ligera cuyo motor Shimano disfruta del exclusivo firmware Rider Sinergy (RS), desarrollado por Orbea en colaboración con Shimano, que otorga un comportamiento más natural a su ligero y compacto motor, acercando mucho las sensaciones de conducción a las de una bicicleta tradicional.
Si pensamos en Orbea y en bicicleta de montaña de doble suspensión hay un nombre que aparecerá al momento: Oiz. La Orbea Oiz es en muchos aspectos la bicicleta de XC definitiva, elegante y veloz en un circuito de copa del mundo, absorbente y divertida en los senderos, y siempre rápida y eficiente. Podemos encontrar la Orbea Oiz tanto con cuadro de aluminio como de carbono y con numerosas opciones de montaje para adaptarse a diferentes usos y presupuestos.
Para los ciclistas que prefieren una bicicleta de montaña rígida, Orbea ofrece dos modelos ineludibles; la Orbea Alma, una bicicleta extremadamente ligera enfocada al máximo rendimiento y destinada a los ciclistas que quieren exprimir cada vatio de energía que generan sus piernas, y la Orbea Onna, diseñada para aquellos ciclistas cuyo objetivo es disfrutar de la montaña con comodidad y control.